De esos barros estos lodos. En verano la gente se desmadro, más de un hostelero miró para otro lado y ahora pasa lo que pasa. Aunque tampoco está probado, ya hay unos acusados. He llegado a intuir que estos piensan que la hostelería es de derechas ¿? Jolines, ya es lo que faltaba. Que se pare el mundo que me apeo. Estos, ¿quiénes son estos? Son nuestros políticos imprescindibles, de la A a la Z, como Amazon. Lo hacen porque tienen miedo y lo quieren compartir. Después son los primeros que se apuntan a las cenas y copas del Partido. Ya no te digo si por medio hay una tarjeta Black: hasta las putas son unas benditas.
Nunca es fácil la relación entre el que manda y el que escribe. Pero hoy viene marcada por procedimientos de persecución descalificadoras, típicamente fascistas. Las presiones son cada vez mayores y el control que ejercen sobre todos es cada vez más insoportable. La información que dan es de segunda mano, ni se preocupan de organizar una campaña para que los perjudicados por esta pandemia se sientan ciudadanos españoles como los que les aporrean.
Lo que está pasando en este país es un verdadero exterminio anímico, lo están castrando, liquidando. Es la victoria de la mala educación, del miedo al prójimo y de las acusaciones infundadas. Ya ni siquiera nadie da los buenos días. Un poco de dignidad.
En un futuro, cuando todo se sepa, entonces sí se hablara más de farmacéuticas (ahora pierden pero se van a poner las botas no tardando mucho) que de cultura, hostelería o lo que sea. Cuando la mierda salga a relucir y los murciélagos se hayan escondido en la cueva, empezarán con la segunda fase del proyecto. Al tiempo.
Mientras tanto, si el tema no va contigo, tranquilo en tu sillón. Ya te tocará.
