Mirando al cielo

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“Es inmoral matar a los ucranianos porque no quieren pertenecer al bloque ruso»

Orhan Pamuk

“El terror de Mariúpol será recordado en los siglos venideros” Zelenski

Para el año 2022, están previstos muchos eventos astronómicos desde lluvias de estrellas, eclipses, superlunas y hasta un eclipse lunar total. Los espectáculos cósmicos incluyen cuatro oportunidades para ver Mercurio y nueve oportunidades para ver lluvia de meteoros.

Los fenómenos astronómicos son deslumbrantes para los observadores de estrellas experimentados o novatos. Es imperdible toda la emoción que nos depara el cielo nocturno de 2022 que no será un año bisiesto, empero, será un año inolvidable para todos los ucranianos que sobrevivan a los cobardes ataques nocturnos de Putin. Porque, ciertamente, a futuro habrá muchas personas que no podrán contar con vistas espectaculares en el cielo sin recordar los eventos malignos perpetrados, en su país, por los rusos durante el año de 2022.

La luna nueva de enero de 2022 se mostraba muy cercana de Saturno y Júpiter. Sumado a la lluvia de Cuadránticas, un espectáculo celestial que proviene de asteroides (la mayoría provienen de cometas). Con sus brillantes meteoros «bola de fuego», con grandes y brillantes explosiones de luz y color. Además, las Cuadráticas solo estuvieron activas durante unas pocas horas en las que se pudo ver de 60 a 200 meteoros por hora. Pienso y no me equivoco, que Vladimir miró al cielo y se inspiró en la lluvia de Cuadránticas para destruir el país vecino, haciendo un show de terror en cada noche de su intento de ocupación.

A la falta de grandes acontecimientos astronómicos en febrero, él empezó la guerra ruso-ucraniana el 24 de febrero de 2022 quemando los cielos. Desde entonces, como animal que no razona y también carece de sentimientos, Putin, está perpetrando el mayor ataque militar convencional en suelo europeo desde las guerras yugoslavas. A él no le importa los miles de víctimas mortales (rusos o ucranianos), menos aún, la crisis de refugiados. ​ A pesar de las dimensiones del conflicto, el viejo Vladimir (el señor Botox, como le conocen en Ucrania)denomina, desde el principio como una “operación militar especial”, evitando utilizar los términos “guerra” o “invasión” para la matanza indiscriminada que está realizando en Ucrania.

Aprovechando la luna creciente del 18 marzo, Rusia bombardeó las inmediaciones de Leópolis, en el oeste de Ucrania. El Ejército ruso bombardeó durante la noche los alrededores del aeropuerto de Leópolis, en el oeste de Ucrania y el punto de paso que usaban la mayoría de los ucranianos que huyan hacia la Unión Europea entrando por Polonia.

El equinoccio de primavera: es cuando el día y la noche duran exactamente lo mismo, 12 horas cada uno. Dando la bienvenida a la primavera Putin, destruyó una base militar en el noroeste de Ucrania y usó los misiles Kinzhal. Y Ucrania denunció el bombardeo de una escuela de arte con 400 civiles (entre ellos mujeres, ancianos y niños) refugiados en el predio.

Sin olvidar a los miles de muertos y heridos en la guerra de Putin, abril, llegó con lluvia de Líridas: Los días de mayor número de meteoros fueron el 22 y el 23 de abril, los días 58 y 59 de la guerra en Ucrania. En la localidad de Bucha anunciaron el hallazgo de 412 cuerpos sin vida y las autoridades de Mariúpol confirmaron el fracaso del corredor humanitario de evacuación. Hubo un bombardeo ruso en Odesa… ¿Para qué seguir contando los muertos? Si la Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ve evidencias crecientes de crímenes de guerra en el país por parte de las tropas rusas. Mientras el alcalde de Mariúpol encontró en su ciudad fosas comunes con varios miles de cadáveres y el papa Francisco criticó las guerras, la de Ucrania y las que ocurren en otras partes del mundo, porque «destruyen a todos» y dijo que es urgente que las sociedades recuperen la «civilización del amor».

Entonces yo miro al cielo y digo:

– ¡Papa Francisco! Yo camino por todos los laberintos del mundo y no encuentro la luz. Yo también critico las guerras: la israelí –palestino, la guerra de Yemen, Etiopía, Siria… ¿Y qué? Si la humanidad siempre sobrevive. Si hay dementes que gobiernan. Me duele la vida que se extingue sin sentido, por una bala o un misil. Mientras a Putin no le importa que le apoden “el carnicero del Kremlin”. Tendrías que orar más para que tus oraciones alcancen a todos, como los misiles, iluminando en las noches oscuras. A Putin yo no digo nada, porque Vladimir no sabe leer el dolor humano, ni logra entender el idioma del corazón (que es el idioma de los niños y de las madres que sufren). Sus sentimientos se secaron en la niñez miserable, triste y abandonada (que él no merecía y no supo superar).

Precario silencio.

Pasan y pasan los tiempos y el ser humano no logra evolucionar espiritualmente. Yo sé que quiero Paz para todos. No sé cómo lograrla.

Miro al cielo y veo meteoros que se confunden con misiles porque los rusos no dejan de cometer crímenes de guerra.